Cal hidraulica
La cal hidráulica es un tipo de cal que, a diferencia de la cal aérea, tiene la capacidad de endurecerse en contacto con el agua, lo que la hace ideal para su uso en ambientes húmedos o en la construcción de elementos expuestos al agua, como cimientos, pozos y muros de contención. Esta cal es obtenida mediante la calcinación de piedras calizas con impurezas, como arcillas y limos, lo que le otorga propiedades de fraguado que no dependen del aire.
Es muy utilizada en la preparación de morteros y mezclas de albañilería, donde proporciona una mayor resistencia al agua, lo que la convierte en una opción perfecta para la construcción de muros en zonas de alta humedad, como sótanos o áreas costeras. Además, la cal hidráulica tiene la capacidad de adaptarse a diferentes tipos de mezclas, lo que la hace versátil para diferentes tipos de trabajos, desde la reparación de fachadas hasta la construcción de estructuras subterráneas.
Otro de los beneficios de la cal hidráulica es que su uso contribuye a la sostenibilidad de la construcción, ya que requiere menos energía en su producción en comparación con el cemento convencional. También permite la creación de acabados más permeables y naturales, favoreciendo la respiración de las paredes y mejorando la calidad del aire en el interior de los edificios.